Aprovechando estos últimos días del mes de noviembre me quise hacer esta reflexión y compartirla con ustedes referente al Buen Fin que acaba de pasar, aquí en nuestro país, siempre he creído que a pesar del esfuerzo que hace el gobierno junto con los empresarios de generar estrategias para detonar la derrama económica como lo iniciaron los norte americanos con el ya famoso Black Friday y que se lleva a cabo en muchos países de todo el mundo, me preguntaba, ¿qué tan bueno es en estos tiempos promover el consumismo en esta era donde la globalización ha jugado un papel desigual sobre todo en los países que están en vías de desarrollo?.
“El consumismo ha tomado papel desigual sobre todo en los países que están en vías de desarrollo”.
Desde hace mucho tiempo la globalización prometió desarrollo y un reparto de la riqueza diferente, pero en muchos rincones del mundo, la gente piensa que ese compromiso se ha incumplido y que la única manera de hacerle frente a los que consideran un nuevo sistema de poder elitista y corrupto es regresar al nacionalismo y a las políticas identitarias. Algunos otros afirman que la globalización genera marginados y eso ha llevado que en muchos países estén en contra de la clase política que prometió que las soluciones globales traerían prosperidad para todos mientras, al mismo tiempo, se convertía en la aliada del 1 porciento de los más ricos del mundo.
“Algunos otros afirman que la globalización genera marginados y eso ha llevado que en muchos países estén en contra de la clase política que prometió que las soluciones globales traerían prosperidad”.
¿La pregunta más importante es si realmente bajan los precios durante el buen fin?
Antes de responder esta pregunta me gustaría contextualizar ya que el buen fin es un evento comercial de periodicidad anual que consiste en cuatro días de promoción y rebajas de productos y servicios durante la tercera semana del mes de noviembre en México. El evento ha incrementado su relevancia desde su primera edición en 2011. Sin embargo, no existe un análisis formal que evalúe el efecto del Buen Fin sobre los precios y las políticas de fijación de precios de las empresas, principalmente debido a la falta de información relevante.
Personas en USA durante el famoso BLACK FRIDAY.
Ahora bien, respondiendo a la pregunta, el buen fin en México reduce en promedio solo el 7% los precios con respecto al precio observado en septiembre antes del evento. Sólo 52% de los productos analizados reduce efectivamente su precio en el Buen Fin. Restringiendo el análisis a productos descontados, se obtiene un descuento promedio de 15%. El aumento promedio de precios antes del evento es de 2%, evidencia de que algunos establecimientos han adoptado prácticas para hacer más evidentes las ofertas del Buen Fin.
Quisiera terminar un poco con lo que comencé, dejando como en mis anteriores columnas esta reflexión, ya que mas allá de que el Buen Fin sea realmente considerado como un evento de baja generalizada de precios, lo que mas debe de interesarnos a todos es si este tipo de eventos solo se genera para que este consumismo desmedido llegue al punto de la marginación de sectores importantes de la población. Siento importante hoy mas que nunca, promover la educación en términos financieros y de finanzas personales a todos ciudadanos con el objetivo de cuidar la economía familiar, evitar el consumismo y replantear nuestras necesidades.
“Siento importante hoy mas que nunca, promover la educación en términos financieros y de finanzas personales a todos ciudadanos con el objetivo de cuidar la economía familiar, evitar el consumismo y replantear nuestras necesidades”.
Y usted, que opina?
La entrada ¿El fin del buen fin? se publicó primero en La CDMX.
