Beirut, 9 Jun (AFP) – Los combatientes kurdos y árabes avanzaban el viernes en un barrio del oeste de Raqa, principal bastión en Siria del grupo Estado Islámico (EI) en donde la coalición internacional liderada por Estados Unidos intensificó los bombardeos aéreos.
Las Fuerzas Democráticas sirias (FDS), apoyadas por Washington, ingresaron el martes en la ciudad, siete meses después de lanzada una importante ofensiva para expulsar a los yihadistas de su “capital” en Siria.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), el viernes tomaron una parte del barrio periférico de Jazra, al oeste de la ciudad.
En el resto del barrio continuaban los violentos combates en donde la coalición bombardeó el jueves por la noche un cibercafé en el que murieron al menos 15 personas, según el OSDH.
“Veintitrés civiles murieron el jueves por la noche” como consecuencia de “25 ataques aéreos”, precisó el OSDH.
“Los bombardeos de la coalición internacional continuaron toda la noche en Raqa y sus alrededores”, informó a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
Los bombardeos aéreos de la coalición buscan, según Rahman, “quebrantar las capacidades de EI, abrir la vía a las FDS en el este de la ciudad y (permitirles) lanzar el asalto en otros frentes”.
Las FDS, también respaldadas en tierra, están posicionadas al este, al norte y al oeste de Raqa, los territorios del sur de la ciudad y del Éufrates están controlados por los yihadistas.
– 40.000 niños en peligro –
Según su portavoz, Talal Sello, las FDS avanzaban el viernes en varios frentes en Raqa.
En el este de la ciudad “tomaron el control del barrio de Meshleb” y “proceden actualmente a limpiarlo de minas y artefactos explosivos”, declaró a la AFP.
Desde allí deben avanzar hacia el barrio lindero de Al Senaa, en donde también hubo bombardeos durante la noche, según el OSDH.
Los combatientes kurdos y árabes sirios avanzan igualmente en la periferia norte de Raqa, según su portavoz.
Abu Mohamad, activista del colectivo “Raqa is Being Slaughtered Silently” (“Raqa está siendo masacrada en silencio”) calificó de “absurdos” los bombardeos de la coalición.
Afirma que, además de los bombardeos, las condiciones de vida se deterioran con penurias de agua y de electricidad, y la apertura de los comercios sólo “una hora o dos” al día.
“La vida de más de 40.000 niños está en peligro”, advirtió el viernes Unicef.
“Los niños están privados de sus necesidades más básicas”, afirmó el director regional de esa agencia de la ONU, Geert Cappelaere.
“Los padres se encuentran frente a una situación imposible”, aseguró Puk Leenders, un responsable de Médicos Sin Fronteras (MSF).
“O se quedan en Raqa y exponen a sus niños a la violencia y los bombardeos aéreos, o intentan hacerles pasar la línea de frente, sabiendo que podrían ser víctimas del fuego cruzado y atravesar campos de minas”, señaló.
– ‘Prioridad’ –
Raqa, capturada por los yihadistas en 2014, se convirtió en símbolo de las atrocidades el EI y en base para la planificación de atentados en el extranjero.
Según el Pentágono, quedan “hasta 2.500″ combatientes de EI en la ciudad.
Decenas de miles de civiles huyeron de la ciudad y sus alrededores desde que las FDS lanzaron en noviembre su vasta operación para expulsar a EI de su principal bastión en Siria.
Quedan hoy en Raqa unas 160.000 personas, frente a 300.000 antes del comienzo de la guerra en 2011, considera la ONU.
La batalla de Raqa es uno de los principales frentes de la guerra de múltiples beligerantes que sacude Siria desde 2011 y dejó más de 320.000 muertos.
El régimen de Bashar al Asad considera que recuperar Raqa es una “prioridad” pero sus tropas están aún lejos de la ciudad.
Desde el martes lograron entrar en la provincia del mismo nombre por el oeste y, ayudados por bombardeos rusos, arrebataron a EI “20 pueblos”, según el OSDH.
Una fuente militar siria dijo el martes a la AFP que el objetivo del avance de las fuerzas gubernamentales en la provincia de Raqa es “garantizar la seguridad de la provincia (vecina) de Alepo contra los ataques de los yihadistas”.