Nos lanzamos por unos jugos y nos encontramos con que —en nuestro tianguis de confianza— no había de naranja porque está muy cara. Así que decidimos preguntar precio por precio.
Y, en efecto, los precios de esta fruta han estado por las nubes provocando, entre otras cosas, que las personas dueñas de los puestos de jugos prefieran no preparar de naranja o en los restaurantes se ofrezcan de otras frutas porque nomás no sale.
Fuimos al tianguis por un jugo de naranja pero no había porque el precio ha ido en aumento
“En los 20 años que tenemos de comercio, la naranja jamás había estado en ese precio, o sea, nosotros compramos normalmente por semana 500 kilos y jamás en la vida un kilo había estado en 45 pesos en la Central de Abasto”, nos contó un marchante mientras despachaba unas fresas con crema.
De acuerdo con el marchante de este tianguis de Naucalpan en Edomex, en los últimos meses el precio de la naranja ha ido variando hasta encontrarla en los tianguis a 50 o 55 pesos por kilo.
Y en su caso para vender unos buenos jugos de naranja la verdad es que… no alcanza.
“Para hacer un litro de jugo es imposible hacerlo con un kilo… ni con dos kilos”. Según sus cálculos, en todo caso, tendría que vender un jugo de un litro a 80 pesos y hasta más de 100 para recuperar su inversión.
“Yo pagó allá (en la Central) a la persona que transporta la naranja a mi camioneta. Luego la transporto. Pago para exprimirla y aparte de exprimirla, se tira la pulpa, entonces, queda muy poco jugo“, explicó.
El kilo de naranja (sin semilla) a 70 pesos
Decidimos seguir dando el rol por el tianguis. Preguntamos con marchantes de los puestos de frutas y nos dieron distintos precios: por la naranja importada y sin semilla nos pedían 50, 60 y hasta 70 pesos por kilo.
Con semilla y la llamada “naranja verde” —que no es otra cosa que la naranja recién cortada— nos pedían de 30 a 35 pesos por kilo.
Eso sí, cada marchante nos explicó que orita en México no hay producción de naranja porque no es temporada. Y que justo por eso entraban al quite las importadas, aunque más caras.
Inflación de locura en México
Recién el Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía) publicó reporte del Índice Nacional de Precios al Consumidor —que no es otra cosa sino el indicador económico que mide los cambios en los precios de una canasta de bienes y servicios que representa el consumo de los hogares mexas.
En este reporte que corresponde a julio de 2024 vimos que la inflación aumentó 1.05% respecto a junio, aunque con un aumento anual del 5.57%.
Uno de los productos cuyo precio se fue a hasta las nubes, durante este mes fue… la naranja con una variación mensual del 18.57%. Y con una anual del 110.9%, en comparación en julio de 2023. Una locura
Aunque para algunos especialistas este aumento no es nuevo, aunque sí representa un trancazo a la economía de las familias mexicanas.
No hay cosecha
Acá aprovechamos para citar la entrevista que hizo la reportera de La Jornada Alejandra Alegría a Ignacio Martínez, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lancen) de la UNAM.
El coordinador explicó que el aumento del precio de la naranja suele ocurrir entre los meses de julio, agosto y septiembre porque no es temporada, además de que se ha registrado una disminución en la producción a nivel nacional.
Entonces, ahí una de las pistas para saber por qué el precio de la naranja ha ido en aumento.
“Esperemos que cuando ya esté en su temporada, probablemente baje un poquito”
Otros factores pueden incidir en el trancazo del aumento de los precios de la naranja como la presencia de plagas en los cultivos o, como ya había mencionado el coordinador de Lancen, la poca producción a nivel nacional.
Como no es temporada, la poca naranja que se llega a vender es importada o es la recién cortada —la naranja verde que se vende en cuanto es el corte y con el tiempo va agarrando color “porque para diciembre ya están muy buenas”, nos dijo el dueño del puesto de jugos.
Esta última no es de la misma calidad como aquellas que ya están listas porque cumplieron con el tiempo de cosecha —por lo general los estados productores predilectos son Veracruz, Nuevo León y Tamaulipas. Eso ocurre entre los meses de noviembre, diciembre y enero.
Ahora lo que le queda a marchantes, como el señor de los jugos de este tianguis naucalpense, es esperar a que los precios bajen.
“Esperemos que cuando ya esté en su temporada, probablemente baje un poquito el precio”, reflexionó el marchante.
O, de plano animarse a vender los jugos con naranja verde como lo vimos en la zona de Pedregal de Santo Domingo en CDMX.
Por cierto, las causas del aumento del precio de la naranja son poco distintas a lo que ha pasado con otros alimentos como el cilantro, cuyos precios fueron una locura entre mayo y junio de este 2024, cuando un manojo de 5 kg llegó a costar alrededor de 500 pesos debido a las sequías y después los aguaceros.