Ciudad de México a 26 de Noviembre del 2018 (redacción).-Tan pronto como la crisis financiera comenzó a retroceder, Jordi Visser supo que algo tenía que cambiar. Los algoritmos comenzaban a dominar los mercados y los fondos de cobertura, como el que él administraba, se enfrentaban a una era más dura.
Así que Visser, director de inversiones de Weiss Multi-Strategy Advisors, comenzó a replantear cómo el fondo de cobertura de 1,700 millones de dólares (mdd) podría sobrevivir en un entorno menos acogedor. La solución fue evolucionar y fusionar al hombre y la máquina. “Competimos contra las computadoras en estos días, por lo que tuvimos que ser más eficientes”, dice Visser. Visser y Weiss no son los únicos que realizan algunos ajustes para una nueva era de inversión definida por la automatización, los algoritmos y el big data. Los analistas denominaron la unión de la inversión cuantitativa y la inversión fundamental como “quantamental”, una frase fea, sin duda, pero que muchos piensan que va a definir el futuro de la industria de la gestión de activos.
Estas iniciativas proliferan en el mundo de las inversiones, desde pequeñas firmas especializadas hasta grandes imperios de gestión de activos. En enero, la división de inversión de JPMorgan estableció un nuevo laboratorio de datos en su división de “soluciones digitales inteligentes”, para tratar de mejorar a sus administradores de cartera, en lugar de reemplazarlos por algoritmos.
La unidad de datos ya utilizó la Inteligencia Artificial, conocida como una red neuronal, para analizar años de transcripciones de conferencias de los resultados corporativos y así identificar qué palabras son particularmente sensibles para los mercados.
Visser admite que no todos los administradores de cartera del fondo de cobertura estaban entusiasmados con las nuevas mediciones, herramientas y expectativas, pero argumentó que las herramientas cuantitativas eran justas, objetivas y necesarias. “Quieren mejorar y abrazarlas, o luchar contra eso”, dice. “Pero este es un caso de adaptarte o morir”.